Cuando alguien está en la búsqueda de una nueva camioneta o piensa en cambiar la actual por algo más novedoso, que se vea deportiva, joven con un toque de sofisticación y elegancia, definitivamente la mejor opción sería la Mazda CX-5 2018 y les platicaré los puntos por los que yo la elegiría como una de mis favoritas en el mercado nacional.
En algún momento de mi vida tuve una CX-7, algo que déjenme decirles no se parece en nada a lo que hoy tiene Mazda por ofrecer en sus productos, pero aún así era un gran auto y sobre todo muy versátil. Pero si comparo hoy la tecnología del motor Skyactiv-G contra el motor turbo que montaba la CX-7 que yo tuve, no dudaría dos veces en cambiarlo. Es una camioneta con mejor rendimiento y aunque el turbo podría extraerse el motor actual de combustión interna de 155 hp Skyactiv-G no es un punto malo, al contrario, sorprende al tener mayor compresión e incluso el botón de Sport.
Es un vehículo que puede obtener un extra del segmento de SUV’s y ofrecer una buena experiencia de manejo.
Si a esto le sumamos la tecnología de la caja automática, el G-Vectoring Control, seis bolsas de aire, alerta de tráfico trasero, monitor de punto ciego, entre otros, hacen de la Mazda CX- 5 una gran opción.
En lo personal me gusta su sistema de auto, Bose Centerpoint de 10 bocinas, su clúster de instrumentos con la pantalla digital de información, que sea Keyless, la comodidad del asiento eléctrico para el conductor, ademas de su pantalla touchscreen de 7” y su gran armado y materiales al interior, que me recuerdan un auto de categoría superior, algo que ha caracterizado a Mazda en sus últimas entregas y esta generación del CX-5 no es la excepción.
Creo que Mazda ha logrado encontrar el punto fino para entregar autos pasionales, interesantes, tecnológicos y de una salida excepcional. Me atrevería a decir que es la única marca de volumen que ofrece interiores de categoría superior y manejo deportivo sin importar la categoría de su producto.
La Mazda CX-5 2018 es el ejemplo perfecto, aunque no fue la evolución exacta de la antigua y desaparecida CX-7, ofrece algo más innovador, ofreciendo un SUV con alma deportiva. Es la conjunción de una gran ideología de diseño, con una característica pensada en el que maneja, además de una nueva visión al ofrecer un producto pasional, divertido y que pueda encantar los sentidos de quien compre una CX-5.
Hoy puedo decir que Mazda hace muy bien las cosas y el ejemplo de ello es la CX-5 2018 un SUV con líneas y trazos muy interesantes que logran enamorarte al hacer una prueba de manejo, lo que recomiendo altamente, pues termina por mostrar el porque de este texto y el porque podría ser una gran opción para tenerla en tu garage.