El equipo responsable del diseño exterior del nuevo SUV de lujo Lexus RX tenía una misión clara: dotar al vehículo de una identidad única con proporciones surgidas de su experiencia de conducción dinámica. Este enfoque marca el desarrollo del “Siguiente Capítulo” de diseño de Lexus, introducido con la nueva generación del modelo NX, a través del cual el estilo transmite directamente el rendimiento del vehículo y la calidad de la experiencia al volante.
Al tiempo que los diseñadores podían mirar hacia el futuro, uno de los requisitos era proyectar la calidad de Lexus como marca de lujo. El nuevo modelo también tenía que ser reconocible como un RX, con referencias a su legado como primer SUV recreativo premium del mundo y primer modelo híbrido del mercado de alta gama.
La incorporación de estas diversas cualidades se pone de manifiesto en un vehículo que proyecta una poderosa presencia sobre el asfalto y un gran potencial de rendimiento, con una imagen audaz y un gran aplomo. La sensación de “novedad” es inmediata y potente, y confiere al vehículo un impacto visual en línea con la calidad de sus tres motorizaciones: el híbrido deportivo RX 500h, el híbrido enchufable RX 450h+ y el híbrido RX 350h.
La imagen lateral del vehículo revestía una importancia especial para la responsable del diseño exterior, Nozomi Hirai, y su equipo:
“Lo primero que queríamos expresar era una imagen audaz, una presencia con un bajo centro de gravedad y una sensación de gran aplomo”, explicó. “Para ello, definimos una postura horizontal de delante a atrás… elevando la parte delantera del capó y rebajando la base de la luna trasera con respecto al RX actual. Al bajar la línea imaginaria inferior de la carrocería, comprimimos la zona por encima de las ruedas, lo que da lugar a una presencia sólida y firme, con un bajo centro de gravedad.” |
Si bien el nuevo RX tiene una longitud total similar a la del modelo actual, el capó se ha alargado, desplazando el pilar delantero más hacia atrás, y la distancia entre ejes se ha incrementado 6 mm. El resultado es que el peso del habitáculo parece descansar sobre los neumáticos posteriores, mientras que las superficies modeladas de los paneles de las puertas, los prominentes pasos de ruedas traseras y las llantas de 53.3 cm (21″) añaden una potente sensación de tracción, que los diseñadores comparan con la de un animal a punto de saltar hacia delante. “Creo que la singularidad de Lexus queda clara en este tipo de expresiones,” dijo Hirai. Los elementos opuestos conviven en armonía, con una sensación de solidez que comienza en el frontal y sigue hacia las superficies posteriores dinámicas.
El frontal del vehículo ofrece una imagen totalmente distinta. El diseño de “Siguiente Capítulo” juega con el concepto de forma de doble punta de flecha de la parrilla característica de Lexus para crear un nuevo efecto de carrocería de doble punta de flecha. La parrilla, por su parte, se ha reinterpretado como una unidad continua: integrada en la carrocería, es también una expresión de la potencia electrificada del RX. La disposición de los nuevos faros delanteros, más finos, y el ancho de vía 50 mm superior subrayan el centro de gravedad más bajo y la prestancia del vehículo.
En la parte posterior, se mantiene el efecto de “techo flotante” característico del RX creado por un pilar D oculto, pero se refuerza la sensación tridimensional. Esto se combina con un techo 10 mm más bajo, que da lugar a una silueta de tipo coupé. La imagen posterior, poderosa y condensada, se realza gracias a un voladizo más corto y a la transición fluida desde los pasos de las ruedas a las luces traseras. Los faros combinados posteriores se integran en una barra de luz que abarca toda la anchura del vehículo y envuelve las esquinas para reforzar la amplitud.