CUPRA vuelve a desafiar los límites de la industria automotriz, yendo más allá, y logrando que el recién presentado CUPRA Terramar America’s Cup ya no solo pueda rodar por asfalto, sino también surcar el mar, llevando así el concepto de su nombre a su máxima expresión. Esto fue posible gracias a un esfuerzo colaborativo entre ingenieros de CUPRA, Brava Boats y la cooperación indispensable del Puerto de Barcelona y el Port Vell, que trabajaron mano a mano para conseguir que el nuevo héroe de una nueva era pueda ser visto navegando por Barcelona, con motivo de la Louis Vuitton 37ª America’s Cup, donde tendrá un papel protagonista.
Alejado de lo convencional. Con acciones puntuales como esta, CUPRA vuelve a demostrar por qué es una marca que no se rige por el statu quo y que busca diferenciarse e inspirar al mundo desde Barcelona. Y es que la Louis Vuitton 37ª America’s Cup resultó un escenario idóneo para mostrar su lado más rebelde: “En CUPRA siempre nos gusta innovar más allá del mundo automotriz, llevando nuestra actitud disruptiva a ámbitos inesperados. CUPRA Terramar America’s Cup es un gran ejemplo de ello: una versión de nuestro nuevo vehículo que navega en el mar, llevando nuestra marca al corazón de la competencia”, explica Ignasi Prieto, Chief Brand Officer de CUPRA. CUPRA Terramar America’s Cup se encargará de encabezar a los AC75, guiándolos hacia las regatas durante las finales de la Louis Vuitton Cup. También será un hotspot para entrevistar a los protagonistas clave del evento, así como recibir a populares streamers e influencers que harán del vehículo su propio set de TV. Grant Dalton, CEO de America’s Cup Event, recalca que “esta iniciativa sorprendente refuerza nuestra colaboración, demostrando una vez más porque somos un match perfecto”.
Creado para sorprender. Lograr que se pueda navegar con el CUPRA Terramar America’s Cup fue todo un reto. Los expertos de ingeniería náutica de Brava Boats, con el apoyo de Vetus como proveedor de componentes náuticos, diseñaron una base a medida para el auto, similar a la de un trimarán, capaz de soportar hasta 2,500 kg sobre las olas del Mediterráneo. Por ello, se tuvo que garantizar que CUPRA Terramar America’s Cup cumple con los más altos estándares de seguridad, mediante rigurosas pruebas de flotabilidad y estabilidad que simulan diferentes condiciones de navegación. Naturalmente, los ingenieros de CUPRA estuvieron involucrados durante todo este proceso, ayudando con la distribución de pesos y colaborando para optimizar el equilibrio del vehículo. Aunque, donde pusieron especial énfasis fue en desarrollar los sistemas de control del automóvil: “Se integraron los mandos electrónicos de maniobra y propulsión en el puesto del conductor, que son especiales para embarcaciones, e independientes del vehículo”, explica Enrique Madruga, responsable del equipo de Vehículos Especiales en el Centro de Prototipos y Preseries en CUPRA. A raíz de esto, se rediseñó el panel de instrumentos, para integrar los modos de navegación y operar la plataforma sin comprometer la estética de CUPRA Terramar: “estas modificaciones aseguran una transición fluida entre las funciones del auto y la plataforma, permitiendo conducir sobre el agua directamente desde el interior del vehículo, pero manteniendo intactas el resto de las funciones del producto en sí”, añadió Madruga. La culminación de este esfuerzo refleja el compromiso de CUPRA con la innovación y la redefinición constante de lo que es posible.