Para Lexus la mejor forma de expresar el lujo es un planteamiento de “menos es más”, basado en la simplicidad de diseño, que puede constituir una forma mucho más eficaz de comunicar la calidad, como pone de manifiesto el interior del nuevo Lexus RX.
Este enfoque fresco y contemporáneo se hace evidente nada más abrir la puerta: las superficies lucen limpias y despejadas, y ayudan a crear una sensación de amplitud y refinamiento.
Lo que experimentamos es el resultado de una evolución del diseño interior de Lexus, como explica Jota Kusakari, diseñador jefe del proyecto: “Nos planteamos el reto de crear un espacio simple pero amable, que no recurriese a la ornamentación”.
Este planteamiento no disminuye en modo alguno el atractivo del famoso lujo artesano takumi de Lexus: “Nos centramos en conferir a los paneles, asientos y reposabrazos una sensación táctil digna de un interior de máxima calidad, prestando incluso atención a la apertura y el cierre de las puertas, y a la calidad del sonido, para conseguir una calidad que inspirase los sentidos”, dice Kusakari.
La nueva simplicidad de diseño se observa en la manera en que fluye el salpicadero, de forma limpia y continua, englobando la visera de los indicadores, el cuadro de instrumentos y los paneles de las puertas. Al equipar el vehículo con el nuevo sistema de apertura electrónica de puertas E-latch, se han podido colocar los tiradores interiores a menor altura, y así abombar más la parte superior de los paneles de las puertas, y crear con ello una extensión natural del cuadro de instrumentos.
Cabina del conductor Tazuna
El principio de simplicidad se complementa a la perfección con el concepto Tazuna de Lexus para la zona del conductor, que racionaliza la colocación y la facilidad de uso de los controles y las Fuentes de información, para que la atención se centre en la conducción.
“En línea con el concepto Tazuna, el diseño de la cabina articula un espacio que permite al conductor entablar una conexión más profunda e intuitiva con el vehículo, y controlarlo exactamente a su gusto”, afirma Kusakari. Esta lógica se aprecia en detalles como la disposición coordinada de las fuentes de información –pantalla de la consola central, indicadores y visor frontal–, de manera que el conductor pueda ver el contenido de las mismas sin apenas desviar la vista.
Calidad sensorial
La calidad sensorial refuerza el impacto del diseño en todo lo que los ocupantes pueden ver, tocar y oír. Esto abarca desde el nuevo sistema multimedia, con una interfaz hombre-máquina mejorada, que combina una intuitiva pantalla táctil con unos mandos físicos, hasta el agradable aspecto y el atractivo táctil de los nuevos acabados y tapicerías, la iluminación ambiental, con un amplio espectro de opciones de color, y el satisfactorio sonido de las puertas al cerrarse.
El diseño relajante y tranquilizador del habitáculo se refleja incluso en la forma en que podemos comunicarnos directamente con el vehículo. El nuevo asistente a bordo “Hey Lexus” está preparado para responder a peticiones e instrucciones emulando una conversación natural. Si le decimos que tenemos hambre, nos recomendará restaurantes cercanos; si comentamos que tenemos frío, ajustará el climatizador.
Auténtica funcionalidad de SUV
El diseño interior se ajusta a la perfección a un SUV, y ofrece la funcionalidad, comodidad y flexibilidad necesarias. Gracias a su estructura y diseño ingeniosos, los ocupantes traseros disponen de más espacio para las piernas y una mejor visión tanto a los lados como hacia delante, también gracias a la baja línea de cintura del vehículo y a la mayor amplitud del campo de visión delantero.
La línea de cintura más baja también facilita el acceso, como también lo hace la regulación eléctrica de los asientos.