El Bronco es un coche muy recomendable, es imponente por su tamaño, por su rango de prestaciones, por su tecnología, su capacidad off road e incluso confort de marcha. Aunque esto último pueda ser algo discutible porque llega bastante ruido a su interior dado que el techo de fibra y es desmontable; como lo son las puertas y otros elementos que inciden en su aspecto más extremo y espíritu aventurero. Conduciéndolo y disfrutando de todo lo que ofrece hemos encontrado estos 10 secretos o claves que esconde y que marcan la diferencia en este coche.
1. El origen. El Bronco nació en 1966 desarrollado sobre la base de vehículos militares fabricados por Ford, pero tomando la inspiración del espíritu de competición creado para los Mustang con el objetivo de ofrecer al comprador americano una asociación de ambos conceptos. El Bronco llego al mercado como un robusto 4×4 con un carácter deportivo orientado a la aventura, que es justamente lo que desprende esta nueva versión del Bronco 57 años después.
2. La competición. El Bronco de 1966 ganó la Baja 1000 en 1969, algo que ningún otro modelo pudo conseguir en más de 50 años. En EE.UU. se vendieron más de 200.000 Ford Bronco de primera generación, y en total se fabricaron más de un millón de unidades en las cinco generaciones entre 1966 y 1996.
3. Potente. El motor es sensacional, grande, potente, con un tacto muy deportivo y con fuerza a bajas revoluciones perfecta para pasar por los sitios más delicados. Es un V6 biturbo de gasolina de la familia EcoBoost, con 2,7 litros de capacidad, con inyección directa capaz de generar sin problemas los 335 CV que anuncia en ficha técnica y un par motor de 563 Nm que responde a la perfección. El motor está asociado a una caja de cambios automática de 10 velocidades que lo hace todo perfecto y que no se siente en ningún momento, ni en carretera ni en recorrido todo terreno. De hecho, tiene un modo de funcionamiento a bajo régimen que le permite evolucionar a 6 km/h con el motor a 2.400 rpm, de forma que no se parara nunca salvo que el obstáculo sea infranqueable.
4. Fiel al diseño. Para crear el nuevo Bronco se escaneó a tamaño real el modelo original de 1966 para garantizar que sus proporciones y silueta siguieran presentes en este. Son igualmente determinantes en su imagen su parrilla y faros circulares.
5. GOAT. El Ford Bronco se ha ganado con todo merecimiento el apodo de G.O.A.T, por “Goes Over Any Type of Terrain”, vamos, que pasa por cualquier parte. En condiciones normales es un tracción trasera con el tren delantero conectable. En el caso del Outer Banks cuenta con una caja de transferencia electrónica de dos velocidades que distribuye la potencia al 50% entre ambos ejes, mientras que el Bronco Badlands incluye un determinante diferencial delantero bloqueable y un ingenioso sistema de desconexión de la barra estabilizadora que permite atacar los obstáculos con diferentes ángulos de ataque entre ambas ruedas. El Badlands, como es lógico, también incluye una caja de transferencia, es electromecánica con dos velocidades y tiene modo automático.
6. Surf. Los asideros delanteros son puntos de amarre capaces de soportar hasta 68 kg perfectos para anclar y transportar objetos más largos, como tablas de surf o canoas.
7. Como un Lego. El techo es desmontable en cuatro paneles y tienen bolsas de almacenamiento en el interior. También son desmontables las cuatro puertas con una única herramienta y dicen en Ford que en solo ocho minutos. Las bolsas de almacenamiento permiten guardar las puertas en el interior.
8. Duro. La carrocería del Bronco está atornillada a un chasis de acero de vigas con siete travesaños que además de una robustez extrema permite alcanzar recorridos de suspensión de hasta 259 mm. La suspensión delantera es de triángulos independientes con muelles helicoidales mientras que detrás hay un eje rígido de cinco brazos con muelles y amortiguadores. En el caso del Badlands los amortiguadores son Bilstein especiales con refrigeración para un uso extremo. El Bronco es como un tanque, pero deportivo y aunque viene equipado de auténtico lujo, para los que piensan en la aventura más extrema no estaría demás incluir la placa protectora para el motor, la transmisión y el depósito de combustible.
9. Secretos. El Bronco lleva escondidos logotipos originales, como un gráfico de la gama del modelo original de 1966, un abridor de botellas en el interior y las coordenadas de los lugares en los que se hizo el desarrollo del coche. Las barras antivuelco soportan el peso del coche y la barra del techo de alta resistencia está equipada con airbags de cortina laterales, airbags laterales en los asientos y airbags delanteros.
10. Off Road. Cualquier conductor, con experiencia o sin ella, pueda sacar el máximo partido al Ford Bronco. El sistema Terrain Management System permite adaptar al Bronco a la superficie por la que evoluciona utilizando un selector con los modos de conducción convencionales como son Normal, Eco, Sport y Mojado, a los que se añaden las opciones G.O.A.T. para el off road con modos de uso Barro/Piedras y Arena, además del rocas y Baja, este último el programa más deportivo, para sacar el máximo rendimiento en prestaciones. Cada uno de estos programas varía el tacto del acelerador, la caja de cambios y la dirección.