«Con el inicio de la Temporada Británica, nos complace unirnos a la celebración del arte floral en Chelsea esta semana, un evento popular en el calendario social de muchos de nuestros clientes. Los códigos de vestimenta son parte esencial del encanto de una ocasión como esta y, al igual que nuestros clientes, nos gusta cumplir con las expectativas. Presentamos un impactante Rolls-Royce Spectre con acabado en Orquídea Terciopelo y una línea Coachline Rosa Peonía, que refleja la serena confianza y la refinada belleza que conecta con nuestros clientes y define nuestra marca.»
Boris Weletzky, Director Regional para Reino Unido, Europa y Asia Central, Rolls-Royce Motor Cars
El éxito continuo de Rolls-Royce Motor Cars se basa en una profunda comprensión del mundo único en el que sus clientes viven, socializan y se divierten. Con este espíritu, la marca se complace en mantener una presencia discreta en los destinos de lujo más populares del mundo.
Esta semana, Rolls-Royce Spectre se une a sus clientes para celebrar el impresionante arte floral que se exhibe en las calles y entradas de las residencias en el corazón de Chelsea, al suroeste de Londres. En consonancia con la temática floral y reflejando la profunda conexión de la marca con la naturaleza, el Spectre presenta un acabado en Velvet Orchid, una de las flores más cautivadoras de la naturaleza, admirada por su intenso color, textura aterciopelada y lujosa apariencia, y se complementa con un delicado Coachline en Peony Pink pintado a mano.
Los motivos florales han inspirado desde hace mucho tiempo los encargos de Rolls-Royce Bespoke. La naturaleza, y en particular las flores, ofrecen un rico lenguaje de simbolismo, sentimiento y belleza. Este Spectre se suma a algunos encargos excepcionales recientes inspirados en el mundo natural, como los célebres Phantom Cherry Blossom y Daisy Cullinan. Estas creaciones no son simplemente automóviles, sino obras de arte profundamente personales, cada una un reflejo de los valores, la identidad y el estilo de vida de los clientes.
